La madrugada me atrapa
como atrapa una tela de araña
como quien se introduce en un hoyo profundo.
La madrugada me absorbe
no puedo escapar de ella
huyo sin éxito.
La madrugada alimenta mi esperanza
recoge los frutos de mi pensamiento
altera las energía que llevo dentro
La madrugada me acoge
me agazapo en su seno
y al mundo de los vivos, ya no vuelvo
La madrugada, sí, la madrugada
endurece mis carnes
y me deja al descubierto
A la madrugada, yo me entrego
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